El pabellón municipal de deportes de El Ejido tardará en olvidar un mediodía tan espectacular como el vivido este domingo en el encuentro que enfrentó a los celestes con la UD Coineña, por el gran fútbol sala que se desplegó y por un resultado que no se decidió hasta tres segundos antes de que el árbitro pitara el final. Un emocionante e intenso enfrentamiento en este grupo Quinto de la Segunda División B que terminó con triunfo casi sobre la bocina por 4-3, sobre un claro aspirante al ascenso. El partido comenzó con un tanto de Miguel Castillo a los tres minutos, y con los niños de las categorías inferiores volcados con sus jugadores en un ambiente excepcional del recinto ejidense. El conjunto de Coín se empleó con disciplina táctica y arriesgando porque los tres puntos tenían una gran importancia, pero no lograron la igualada hasta el minuto 18 por mediación de Óscar. Al descanso 1-1, pero lo mejor estaba por llegar. A los 3 minutos de la reanudación, Ale ponía a los malagueños con ventaja, pero la alegría les duró muy pocos minutos. Jesús Bustos, que fue sin duda el gran protagonista del choque, igualaba en el minuto 6 de la segunda mitad (2-2). Lo mejor y lo más emocionante estaba por llegar. El equipo de Coín se vino arriba y presionó la meta de Pompas que estuvo a su nivel, pero también con la fortuna de tener a los postes de aliado. Recta final del partido y los jugadores del Club Deportivo El Ejido defendían el punto sin renunciar a crear peligro sobre la meta visitante. Partido abierto, de ida y vuelta, en el que todo podía pasar y Bustos anotó el 3-2 restando cuatro minutos, tras la gran jugada de Kostas. Lo intentaron todo los de Jordi Pérez, pero no tuvieron la fortuna de los ejidenses que completaron un gran partido y cualquiera pudo ganar. A falta de 17 segundos Isaac empató a tres y casi sobre el pitido final Jesús Bustos desató la locura deportiva en el pabellón, desde el parquet hasta la grada. Sólo quedaban tres segundos, para certificar un gran triunfo, merecido y muy laborioso ante un gran rival como la UD Coineña que terminó desolada tras consumarse la derrota.