La delegada territorial de Agricultura destaca la importancia de estos incentivos que se convocaron en marzo y se han resuelto en un tiempo récord
La delegada territorial de
Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Aránzazu Martín, ha
mantenido un encuentro con el sector pesquero de Carboneras, puerto base de la
principal flota de palangre de superficie en el caladero Mediterráneo, para
abordar las distintas actuaciones de la Administración Pesquera en relación a
esta flota, entre las que cabe resaltar el pago de las ayudas concedidas por el
cese de la actividad pesquera de la flota
dedicada al pez espada y al atún rojo.
En la reunión han participado el
gerente de Carbopesca, Pedro Hernández, el secretario de la Cofradía de
Pescadores, Simón Pérez y el alcalde del municipio, José Luís Amérigo.
Hay que recordar que la Junta de
Andalucía convocó el pasado mes de marzo las ayudas destinadas a la
paralización temporal de la flota andaluza de la modalidad de palangre de
superficie que faena en el caladero nacional mediterráneo. El presupuesto
previsto era de 650.000 euros, cofinanciados por el Fondo Europeo Marítimo y de
Pesca (FEMP).
En la reunión mantenida con este
sector la delegada ha informado sobre el pago de las ayudas concedidas el
pasado mes de noviembre y que alcanzan los 300.000 euros, resultando
beneficiarios 21 buques y un tripulante de los mismos, lo que viene a suponer
el 100% de los buques solicitantes.
La delegada ha destacado que “estas
ayudas son de vital importancia porque contribuyen a paliar la inactividad de
la flota de palangre de superficie en un período de enorme incertidumbre provocado por la crisis
sanitaria del Covid-19”.
En ese sentido, Martín ha subrayado el trabajo del
Gobierno de la Junta “para acelerar la tramitación de ésta y otras ayudas
básicas para el mantenimiento de la actividad pesquera, y que en tiempo récord
se han resuelto”.
Las ayudas, previstas en el Programa
Operativo del FEMP 2014-2010, que arrancaron en 2018 con un período máximo
subvencionable de 30 días, se han duplicado en 2020 al ampliar su cobertura
hasta los 60 días de inactividad
pesquera, por períodos mínimos de 5 días consecutivos, dentro de la
parada temporal.
A pesar de que la mayor parte de esta
flota debe respetar una veda temporal (desde el 1 de enero al 31 de marzo), en
aplicación del plan de recuperación plurianual para el pez espada del
Mediterráneo, hasta ahora no habían podido percibir ayudas que cubriese más
allá del 33% de la parada obligatoria que deben realizar. Es por ello que,
tanto la delegada territorial de Agricultura como el propio sector de
Carboneras coinciden ”en la importancia de que la flota de palangre de
superficie pueda recibir estos incentivos, ya que permiten sobrellevar los planes de recuperación del
atún rojo y el pez espada, cuyas capturas están sensiblemente limitadas”.
Aránzazu Martín aprovechó su visita al
puerto de Carboneras para embarcarse en el buque “Hermanos Caparrós Hernández”
y escuchar de primera mano de los hermanos Francisco y David, como anfitriones
del pesquero, “la dureza del trabajo de estos pescadores, con largas estancias
fuera de sus hogares y otros avatares propios de la modalidad del palangre de
superficie”.
Desde el sector se trasmitió a la
delegada la necesidad de incrementar las cuotas, principalmente para el tope de
capturas del atún rojo, una especie en claro incremento poblacional, pero sobre
la que siguen aplicándose restricciones de pesca que merman la rentabilidad de
la flota. Asunto este que debe ser abordado por la Comisión Internacional para
la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT), organismo que establece los totales
admisibles de capturas para esta y otras
especies.
La delegada territorial de
Agricultura, que ha agradecido al sector este encuentro, lo ha animado “a
aprovechar el fondo FEMP en las próximas convocatorias como una oportunidad
para mejorar la flota actual en sus distintas modalidades de arrastre, cerco, palangre
y artes menores”.