La estrella alicantina llega en su madurez deportiva plena después de que Manolo Berenguel se fijase en él en el año 2013, en la final del Campeonato de España juvenil contra Petrer
Dos años después, Carlos Jiménez llegaba a
Soria y entraba en la Superliga por la puerta de un grande.Pero esta es una
historia que hay que comenzaren 2013, mes de abril. Berenguel, que ahora de
nuevo ha cogido las riendas de la cantera y al que se ha hecho referencia como
entrenador formador antes de consagrarse en las dos máximas categorías,
femenina y masculina, dirigía por aquel entonces a un Unicaja juvenil en el que
el referente era nada menos que Juanmi González. Se llegó a la final, una más
en aquella etapa, y en ella se apuró hasta el tie-break. Con el respeto debido
al resto de su equipo, el Santo Domingo Voleibol Petrer tenía en el dorsal 9 a
su pieza clave,un joven talento de 18 años que atacó la friolera de 70 bolas en
el partido. De ello puede dar fe quien hizo aquella estadística por parte
ahorradora, un tal Guille Carmona. Él solo no, porque esto es voleibol, pero
casi, condujo a su grupo de amigos al cetro nacional, MVP merecido, como el
reconocimiento a Tino Callado.
Recibió y atacó el último punto por zona 3,
haciendo suyo todo el campo alicantino, y fue el primero que abrazó a Manolo
Berenguel incluso antes del saludo final entre los dos equipos. El nijareño
reconoce que desde aquel día se fijó en Carlos Jiménez y lo quiso para su
equipo, secundado en ese deseo por Carmona. Han pasado siete años y la pareja
de técnicos de Unicaja Costa de Almería lo ven cumplido: Jiménez, Carlos,
internacional, hará tridente por las bandas con otros dos Red Lynxes, Colito e
Iribarne, en un creer en el empuje de estas generaciones de jóvenes consagrados.
Nacido en Petrer el 12 de agosto de 1995, con 195 centímetros de altura y
toneladas de calidad, pasó de Soria a Teruel, y de ahí a Palma, siendo su
cuarto destino ahora Almería: "Ficho principalmente porque sé que es un gran
club, con mucha historia a sus espaldas y con una gran infraestructura detrás
de todo, y porque es un equipo donde se trabaja duro todos los días para poder
pelear por todos los títulos; para mí esa tiene que ser siempre la línea a
seguir".
A favor de las dos partes, que ya son solo
una, queda que "ha sido una negociación larga, ha habido mucho tiempo para
pensar todo bien y elegir la mejor opción, pero sí que desde primer momento ha
habido interés por ambas y eso quizás al final ha facilitado las cosas". Se
sabe querido y deseado, y por ello espera"poder devolverle al club esa confianza
depositada en mí", textualmente. Además, su impresión desde fuera es de una
alta consideración: "Lo digo siempre, que Almería es un equipo muy profesional
en todos los sentidos y creo que eso es muy importante para el jugador;al final
uno busca una cierta estabilidad en todas las facetas, que se reconozca su
trabajo como profesional, y Almería cumple a la perfección con todo ello".
Viene con la absoluta convicción de ser recordado: "Intentaré aportar mi 'granito
de arena' al gran proyecto que se está realizando; soy un jugador que vive por
y para el vóley, porque es mi pasión, y cuando pones todo tu empeño en algo,
puede salir bien o puede salir mal, pero al menos estaré tranquilo".
No sabe jugar de otro modo que no sea "dar mi
100 % en todo lo que hago", asegura para después añadir que "eso es al final lo
importante, que cada jugador dé lo mejor de si mismo, porque así es como
llegarán los resultados". Por varios de los que van a ser sus compañeros, puede
hablar en igual tono al conocerlos personalmente y al tener incluso amistad: "En
el mundillo del voleibol al final prácticamente todos nos conocemos, si bien es
verdad que voy a tener bastante suerte porque algunos de los que serán mis
compañeros esta temporada son muy amigos míos". Con Ignacio Sánchez y Colito ha
coincidido en Soria y Teruel, y con Fran Iribarne en Palencia,"y tenemos muy
buena relación", desvela, además de con Mario"en la Selección". De los
confirmados hasta el momento, "a Marlon no lo conozco personalmente, pero tengo
muy buenas referencias de él". Mimbres, los hay: "Crearemos un gran vínculo
entre nosotros como equipo y con los demás compañeros que estén por llegar".
Poseedor, como Colito, de un triplete, "el objetivo
cada año es ese, el intentar repetir esa hazaña, independientemente del equipo
en el que esté; ojalá se pudiese volver a repetir, sabiendo que este club ya lo
hizo antes". Sin dudarlo, lanza la promesa de la constancia: "Nosotros
trabajaremos para volver a repetirlo". Pero hay algo más a lo que apostar
fuerte, un 'debe' en su carrera que en escasas fechas puede quedar saldado:
"Para mí sería un sueño jugar en Europa; aún no he tenido la oportunidad de hacerlo
con un club, es algo que tengo pendiente y que ojalá que pueda cumplirlo este
año". Sería un complemento a una trayectoria que le ha dado motivos para el
orgullo: "Estoy muy contento, me han tratado genial en todos los equipos en los que
he estado y solo tengo palabras buenas para las personas que me he cruzado en el
camino, pero sobre todo estoy satisfecho porque todos los cambios que he hecho
han sido porque de verdad lo he sentido en ese momento".
El complemento a la última afirmación es
sencillamente lapidario: "Cuando decides con el corazón, más allá del resultado,
estás haciendo lo correcto". Es por ello que si llega a Almería lo hace con el
equipaje cargado de todo su potencial y ambición: "Me encuentro en un momento
muy bueno de mi carrera, tanto en lo deportivo como en lo personal; en Palma he
podido forjar aun más mi carácter y mi juego, estoy muy agradecido por estos
dos años que he jugado allí y espero poder seguir creciendo y puliendo detalles
durante esta nueva temporada en Unicaja Costa de Almería".
El confinamiento no
le ha hecho mella: "Dentro de lo que cabe, lo he pasado bien;he intentado
siempre hacer cosas para estar distraído y que los días se pasasen más ameno, todas
las tardes he hecho mi rutina de entrenamiento para intentar mantener un poco
la forma". Es optimista de cara al inicio de temporada con público: "La cosa
está yendo de una manera positiva, se están haciendo las cosas bien, y espero
que se pueda jugar con afición, lo que será un plus para nosotros, pero siempre
y cuando no se ponga en riesgo la salud, llevando a cabo las medidas indicadas
por Sanidad para hacerlo de forma segura".
A esa hinchada blaquiverde, un mensaje:
"Estoy muy contento por fichar por un gran club como es Unicaja Costa de
Almería, tengo muchas ganas de ya de poder vernos todos en el pabellón, de
disfrutar de tardes de buen espectáculo de voley y seguro que vamos a intentar
dar lo máximo de todos nosotros para intentar ganar el máximo de partidos
posibles y, por qué no, soñar con los títulos, que estamos en disposición de
ello". En el Moisés Ruiz se ha sentido cómodo, respetado y protagonista de los
valores del deporte: "El año pasado, en una jugada, el balón me rebotó en la
cara y me sacó una lentilla; Jorge Soriano inmediatamente se vino conmigo al
vestuario, estuvo pendiente de mí, me trajo líquido de lentillas, porque yo no
tenía recambio, y fue un detalle que se me quedó marcado, porque gracias a él
pudo continuar el partido; se lo agradecí mucho, el detalle que tuvo conmigo, a
pesar de ser rival en ese momento, y me gustaría que se supiera porque esos
gestos merecen la pena".
Para finalizar, y como muestra de ese valor
humano que tiene y al que es capaz de dar mucho valor en los demás el gran
Charly Jiménez, se puede regresar a Blanes siete años antes, al referido
Campeonato de España juvenil con su pueblo, él ya en la Permanente y siendo
internacional, frente al ahora su equipo: "Uno de los días más felices desde
que juego a voley, ya no solo por ganar el campeonato, sino por lo que
significaba para nosotros como club y como pueblo; éramos un grupo de amigos de
clase de 5° de Primaria que decidimos probar a jugar y desde entonces no nos
hemos separado nunca; fueron muchos años de sacrificio, de viajes, de derrotas,
de llantos y quizás ese momento para nosotros fue la recompensa a todos esos
esfuerzos que llevábamos realizando desde niños, cuando un día decidimos
empezar a jugar en el patio de nuestro colegio". El petrelense es una
demostración de que Unicaja Costa de Almería quiere calidad también humana en
sus filas.