El pasado martes agentes de la Guardia Civil de Almería procedieron a la detención de C. D., de 21 años de edad, a la que le constan dos requisitorias en vigor por sendos robos con violencia o intimidación cometidos en las localidades de Moraira (Alicante) y Alcobendas (Madrid). Esta detención es el resultado de las actividades preventivas en la lucha contra la delincuencia, que desarrolla la Guardia Civil en materia de seguridad ciudadana, en esta ocasión para dar una rápida respuesta a un supuesto caso de robo con violencia o intimidación mediante el conocido como método de 'el abrazo'.
El inició de esta actuación tuvo lugar hace tres días, tras recibir una llamada telefónica alertando del intento de robo mediante este conocido método sufrido por una pareja de turistas extranjeros en una zona turística de Vera. Rápidamente los agentes se trasladaron hasta el lugar, entrevistándose con las víctimas, si bien las mismas no presentaron denuncia, ya que no les habían llegado a sustraer nada; eso sí, los agentes obtuvieron importante información para poder localizar a los presuntos autores.
La Guardia Civil estableció un dispositivo de búsqueda del vehículo utilizado por los presuntos autores, el cual dio resultado poco después cuando lo localizaron junto a la salida de un supermercado en Mojácar, ocupado por cuatro personas, dos hombres y dos mujeres. Una vez identificadas las cuatro personas, los agentes compobaron que los cuatro cuentan con numerosos antecedentes por hechos similares. Además a una de ellas, C. D., le constan dos requisitorias en vigor por robos con violencia e intimidación, uno cometido en la localidad de Moraira y otro en Alcobendas. Así, la Guardia Civil detubo a de C. D., por estas dos requisitorias que tiene en vigor.
Este tipo de delitos es cometido por grupos organizados, normalmente itinerantes que se mueven entre diferentes provincias, donde después de cometer los hechos delictivos abandonan rápidamente la ciudad para evitar ser localizados e identificados, y por consiguiente evitar su detención. Para llevar a cabo estos hechos los autores normalmente abordan a personas mayores o con movilidad reducida, con cualquier pretexto, preguntar por la ubicación de un hospital o centro de salud, o incluso se acercan haciendo creer a la víctima que son conocidos o tienen terceras personas conocidas en común. Es en ese momento cuando la mujer, presunta autora de los hechos, se muestra amable y cariñosa con la víctima, llegando a darle varios abrazos, durante los cuales aprovecha para apoderarse de las joyas que las víctimas llevan puestas.