La empresa almeriense Ecoculture Biosciences ha conseguido excelentes resultados en producción y calidad en el cultivo de aguacate en una zona con condiciones muy adversas, caso de la Alpujarra granadina, superando los 15.000 kilogramos de producción por hectárea concretamente en Órgiva, donde la sequía y otros factores ambientales como las altas temperaturas o la radiación en verano y las bajas temperaturas o heladas en invierno ponen a menudo en jaque a los agricultores tanto de esta comarca como de la Costa Tropical.

 

Al escaso almacenamiento de agua que existe en el campo alpujarreño se suman las fuertes restricciones del Parque Nacional de Sierra Nevada, que impiden la construcción de grandes balsas para el riego o la alteración del caudal ecológico de los ríos para regar los campos. Todo ello deriva en sanciones por incumplimiento de la ley medioambiental a los agricultores de la zona, quienes tienen que lidiar con estas condiciones extremas para reducir los efectos negativos que estos factores de estrés producen en los cultivos.

 

Ecoculture Biosciences ha logrado resolver cuestiones como la caída de la fruta y la reducción de su tamaño, las deficiencias de zinc y calcio o la reducción de la vecería o alternancia en el cultivo mediante un programa eficaz y sencillo con el uso de varios de sus productos, gracias a lo cual la producción de aguacate ha superado los 15.000 kilogramos por hectárea en un cultivo en Órgiva durante la campaña anterior.

 

“Hemos encontrado menor caída de fruto y mayor floración, cuajado e incremento del rendimiento, tamaño y forma más alargada del fruto, reduciendo la cantidad de frutos pequeños y redondos, después del uso de NHDeltaCa, XStress y CalFlux en el cultivo de aguacate en esta zona de la Alpujarra”, explica el gerente de Ecoculture Biosciences, Ángel Ruiz Serna.

 

“NHDelta crea un ambiente óptimo para el desarrollo radicular y la formación de pelos absorbentes secundarios. Facilita el establecimiento de microorganismos beneficiosos de suelo, reduciendo la aportación de nitratos y la dotación de agua de riego en cantidades considerables, pero al mismo tiempo aumentando la producción, calidad y postcosecha de la fruta”, explica Serna.